Opinión
Lista de deseos, versión realidad
1. Las personas servidoras públicas de la Cámara de Diputados y del Poder Ejecutivo son responsables y empáticas, y hacen lo necesario para que sea una realidad el que las deportistas profesionales cuenten con un salario base. El martes el Senado de la República aprobó una iniciativa de reforma a la Ley Federal del Trabajo, en ese sentido.
2. La Selección Mayor Femenil Mexicana avanza a la final de la Copa Oro W, al vencer este miércoles 06 de marzo a su similar de Brasil, y gana el torneo. Pase lo que pase, las futbolistas de nuestro País, y las estructuras de la industria de este deporte, siguen transformándose para bien. Con el tiempo y esfuerzo sostenido, llegamos a un nivel en el que para nada se duda de que participaremos y competiremos en los mundiales de la FIFA.
3. Hay reparación del daño a todas las jugadoras del Necaxa, víctimas directas e indirectas de Jorge Gómez; se garantiza la no repetición de abuso de poder ni de hostigamiento sexual, y otros delitos; se aplica el protocolo de hoy y en adelante, y lo mejoran para concretar espacios libres de violencias para todas las mujeres. Se protege, en resumen, a las futbolistas y se crea un entorno sano y propicio para su desarrollo personal y profesional, desde cada club, la liga y la Federación Mexicana de Futbol. Nota: se cumplen tres meses de que la revista Proceso evidenció las acusaciones contra Gómez y lo único que supimos, por el club, es que él renunció a su cargo como entrenador. La liga dejó de pronunciarse.
4. Hay más y mejor investigación sobre la lesión de ruptura de ligamento cruzado anterior en deportistas mujeres. Esto, con la intención de tener mayor conocimiento para prevenir y tratar el padecimiento que deja fuera de la cancha a las deportistas, por más de ocho meses, y que últimamente ha sido recurrente, en futbolistas en todo el mundo.
5. La maternidad es una elección posible y bien arropada por los clubes -empleadores-, para cada futbolista de la liga mexicana. La orientación o identidad sexuales de las deportistas, sus cuerpos, dejan de ser motivo de atención, discriminación, y/o faltas de respeto. Experimentan plenitud y bienestar.
6. Hay una mejor calendarización de los juegos de la Liga BBVA MX Femenil, en términos de que hay tiempo suficiente para la preparación entre partido y partido, incluido el entrenamiento invisible, que contempla descanso. Esto, con el fin de contribuir al bienestar físico y mental de las jugadoras, que finalmente también se traduce en un mejor espectáculo en el césped, en un ganar-ganar.
7. Existe un arbitraje profesional, experimentado y justo para la Liga BBVA MX Femenil. Nota: Torneo tras torneo, las futbolistas y afición padecen las decisiones de los jueces en el campo, que perjudican al juego y, a veces, a la integridad de las deportistas. Esta semana la jugadora de Xolos, Mónica Alvarado, expresó su inconformidad con la actuación del cuerpo arbitral en el partido ante Pumas, en el que resultó herida del rostro y con tarjeta amarilla.
8. Son las personas periodistas, con perspectiva de género, las que realizan la cobertura mediática del deporte realizado por mujeres. O, si se trata de personas de medios independientes, tienen también esta perspectiva y los distingue su ética y respeto. Así se evita reproducir sexismo, machismo y fallas, en la información, y en cambio se genera una mayor visibilidad para las deportistas. Hay una cobertura igualitaria y profesional.
Está cerca el 8 de marzo, en el que recordamos cuánto hemos avanzado, gracias a muchas mujeres, en el camino hacia la igualdad de género, y cuánto nos falta recorrer. En este listado me refiero a aspectos particulares que necesitan mejora en el deporte hecho por mujeres, sin embargo, son cuestiones que deseo para todas las mujeres, dentro y fuera del territorio mexicano; dentro y fuera de una cancha. Lo puse en clave “como si ya fuera un hecho”, con fines de dimensionar y transformar.
Me refiero a que deseo para todas nosotras: salario justo e igualitario; estructuras que impulsen nuestro mejor desempeño, competitividad y disfrute; garantías del goce de salud y de recuperación de padecimientos, tomando en cuenta nuestro cuerpo y necesidades específicas; un entorno propicio para nuestro desarrollo personal y profesional, que esté libre de violencias; libertad de elección, respeto y trato digno; una jornada laboral que nos permita equilibrio, descanso; autoridades y regulaciones justas que vean por el bienestar común; discursos y narrativas que sean respetuosas hacia las mujeres, dignificantes.
Vamos, juntas y juntos, en este camino para hacer realidad todas estas cuestiones, y más de ellas, paso a paso, reto a reto. Sé que así pasa.
Sobre la autora
Miriam Padilla nació en la tierra de la torta ahogada y se sabe una apasionada del futbol. Estudió Periodismo en la Universidad de Guadalajara y la maestría en Comunicación de la Ciencia y la Cultura del ITESO. Ha dedicado su tiempo y energía a espacios como el periódico El Informador, a blogs deportivos independientes, y al activismo y la construcción con mujeres, desde el colectivo ciclista Femibici.