Opinión
La situación de las selecciones mexicana, jamaiquina y española
La histórica Charlyn Corral (Estado de México, 32 años) sumó tres asistencias y un gol en partido de la Selección mexicana.
Entró de cambió, jugó 45 minutos y lució. La histórica Charlyn Corral (Estado de México, 32 años) sumó tres asistencias y un gol en partido de la Selección mexicana. La pichichi de la liga española destacó, al igual que la muy querida por la afición, María Sánchez, y dolorosamente el fin de semana nos perdimos las acciones del equipo nacional. Enseguida les cuento por qué.
Esta semana tenemos noticias significativas sobre la Selección Mayor mexicana, la española y la jamaiquina, respecto a competencias internacionales y esfuerzos por lograr condiciones justas para desempeñarse en el deporte. Es fecha FIFA y por tanto la liga mexicana de futbol femenil tiene un receso hasta el 2 de noviembre, y las futbolistas seleccionadas entran en activo.
Vayamos por cercanía geográfica y empecemos con nuestro país. La Selección mexicana goleó a Jamaica en los Juegos Panamericanos el domingo y en México nos perdimos las acciones del juego. Estaba anunciado que Panam Sports transmitiría el partido que terminó 7-0, sin embargo, no fue así. Diversas personas reportaron en “X” la ausencia de transmisión y lamentaron la imposibilidad de observar las actuaciones del conjunto tricolor y, en particular, las anotaciones de María Sánchez (12′, 75′), Karla Nieto (35′), Kiana Palacios (42′), Diana Ordóñez (58′), Alicia Cervantes (68′) y Charlyn Corral (85′).
El siguiente partido de la Selección es hoy 25 de octubre, a las 17:00 horas, ante el país sede: Chile. Después enfrentarán a Paraguay el 28 de octubre, a las 10:00 horas. Esperemos que esta vez sí sean transmitidos los partidos, pues los organizadores para nada pueden darse el lujo de dejar fuera de la competencia a miles de personas, con el mundo globalizado/tecnológico que tenemos. Ya me gustaría, además, que desde la Federación Mexicana de Futbol estuvieran atentos a detalles importantes como garantizar que sus selecciones puedan ser vistas en México, y el mundo, y se contribuya así a la consolidación y crecimiento de la base de personas aficionadas.
Los Juegos Panamericanos son la competencia deportiva internacional más importante del continente y el objetivo es volver a casa con medalla, de acuerdo con Andrea Rodebaugh, directora de selecciones nacionales femeniles. Hay expectación de la afición por ver el funcionamiento del equipo nacional, porque nos hicieron falta en el Mundial, y porque el proyecto de Rodebaugh y del director técnico Pedro López recién comenzó en septiembre de 2022, con un plantel que tiene algunas modificaciones.
La Selección Mayor femenil ha participado siete veces consecutivas en Panamericanos; de esas ocasiones, destaca que la delegación nacional se llevó una medalla de plata en la edición de Winnipeg, Canadá, en 1999. También tiene tres medallas de bronce, una de ellas conseguida en los juegos de Guadalajara 2011. Esta vez buscarán obtener un mejor resultado que en Lima 2019, donde quedaron quintas. Eso fortalecerá la confianza y la consolidación del equipo que encabeza Pedro López, sobre todo porque existe la aspiración de jugar en el Mundial de 2027.
Las últimas justas internacionales en las que México pudo figurar con su Selección femenil fueron los Juegos Centroamericanos y del Caribe, en julio, y el Mundial de la FIFA, en agosto. En la primera competencia el equipo nacional triunfó al obtener la medalla de oro, sin embargo, las mexicanas no clasificaron para participar en la máxima competencia global que las españolas ganaron el 20 de agosto.
Por cierto, hasta la mañana del martes, ocho mujeres deportistas habían ganado nueve de las 19 medallas de oro que México acumulaba, cinco habían obtenido la condecoración de plata, de 10 totales, y nueve atletas femeninas habían logrado cinco medallas de bronce del acumulado mexicano de 12. Hasta ese día, México ocupaba el segundo lugar en el medallero, por detrás de Estados Unidos.
Segunda noticia. Dijimos que México goleó 7-0 a Jamaica en ese primer partido de Panamericanos. Como contexto, hay que decir que el plantel del país jamaiquino no es el mismo que participó en el Mundial femenino de agosto. Las jugadoras que representaron a su país hace dos meses anunciaron el 21 de octubre, mediante un comunicado, que renunciaban a ser convocadas a la ventana internacional del mes, que corresponde a los primeros clasificatorios de la Copa de Oro. Esto, en protesta al “constante maltrato” recibido de parte de la federación de futbol en su nación.
Las futbolistas jamaiquinas denunciaron que han tenido que lidiar con retraso en pagos, falta de comunicación, pobre organización y manejo de situaciones, por parte de la federación. Los pagos corresponden a la compensación por su participación en la copa del mundo y a bonos por calificar en 2022.
Ya en junio de este año, las seleccionadas habían publicado otro comunicado en redes sociales en el que mostraban su desacuerdo con la federación jamaiquina. Esa vez hicieron del conocimiento público que, en múltiples ocasiones, se habían sentado a expresar a la federación su preocupación por deficientes planeación, transporte, hospedaje, condiciones de entrenamiento, compensación a su trabajo, comunicación, nutrición y acceso a recursos apropiados para su desarrollo como deportistas de alto rendimiento. Levantaron la voz, porque no eran resueltas las peticiones de sus necesidades, en tiempo y forma, y consignaron que eso impactó en la pérdida de juegos amistosos que las podían preparar para el Mundial femenil. Sin embargo, finalmente acudieron a la competencia en Australia/Nueva Zelanda y lograron llegar a octavos de final, dejando en el camino a una selección y una jugadora históricos, que se despidieron antes de lo imaginado: Brasil y Marta. ¿Hasta dónde hubieran llegado, y qué nivel futbolístico tendrían ahora, de ser apoyadas?
En el comunicado del pasado sábado, las jamaiquinas expresaron la esperanza que tienen en que la medida que toman, de evitar ser convocadas, lleve a cortar el círculo de “maltrato” de la federación. Es una estrategia que en su momento tomaron las seleccionadas españolas, que son nuestras terceras protagonistas en esta columna.
El lunes, las futbolistas de la Selección de España dieron un paso más en dirección a recibir un trato respetuoso y profesional por parte del órgano rector de su deporte en el país. Esto, al firmar un convenio que marca las pautas para la regeneración de la federación de futbol, el impulso y profesionalización del futbol femenino, y que plantea acciones concretas para evitar la repetición de abuso y acoso a alguna jugadora.
De acuerdo con el documento, que recoge el diario El país, entre otras cosas se propondrán “herramientas para garantizar un sistema de retribución justo en todas las categorías deportivas y trabajar conjuntamente para mejorar los acuerdos económicos existentes relacionados con las jugadoras de la selección de todas las categorías”. Además, se desarrollarán “protocolos de prevención y actuación para situaciones de discriminación, abusos o acoso sexual y acoso por razón de sexo o autoridad”.
Hay que recordar que las futbolistas españolas empezaron por renunciar a ser convocadas a la Selección, al ver que el caso de violencia sexual ejercida por el entonces presidente de la federación, Luis Rubiales, era minimizado. Luego fueron forzadas a regresar al conjunto nacional, por la federación, mas dieron el extra en ese contexto de malestar, al reunirse con las autoridades competentes para manifestar desacuerdos y necesidades, y negociar medidas. Es entonces que llegó la firma de este convenio con el presidente de la comisión gestora de la Federación Española de Fútbol (RFEF), Pedro Rocha, y el presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD), Víctor Francos, que funge como mediador y representante del gobierno español. El compromiso incluye la creación de una comisión mixta que dé seguimiento al cumplimiento del convenio, con reuniones periódicas.
Otra noticia que para nada podemos obviar es el regreso de Jenni Hermoso, delantera del Pachuca, a la concentración de la Selección. Ella fue arropada por sus compañeras y personas aficionadas, en el entrenamiento en la Ciudad del Futbol de Las Rozas, y estuvo presente en el acto público de la firma del convenio. Ella, que desafortunadamente fue víctima de Luis Rubiales y de la estructura futbolística que le rodeaba. Nunca debió de dejar de ser convocada, porque su talento y aporte histórico a la Selección son más que notorios. Jamás debió de ser besada sin su consentimiento.
Desde esta columna me sumo a las peticiones de igualdad y de justicia de las futbolistas jamaiquinas, españolas y del resto del mundo. Son elementos que necesitamos para un mundo mejor. En México, y otros países del orbe, las futbolistas experimentan la desigualdad de género, en tanto que hay una “diferencia existente entre mujeres y hombres, por lo que respecta a sus niveles de participación, acceso a los recursos, derechos, remuneración o beneficios” (García-Calvente et al., 2016). La industria del futbol es un ámbito más en el que el patriarcado y el machismo se cuelan y en el que históricamente nos deben a las mujeres justicia y respeto. Así es que manos a la acción, personas en las federaciones, en particular mayoría de hombres que están en los puestos de poder y toma de decisiones, para impulsar y consolidar los cambios necesarios para la igualdad. Celebro las acciones y valentía de las futbolistas, aunque sabemos que lo tendría que suceder es que solo se dediquen al deporte, en vez de dividir tiempo y energía al alto rendimiento y a gestionar que las estructuras les den soporte. De todas maneras, vamos juntas. Se acabó.